Las Au pair o Fille au pair, es un tipo de semi-trabajo. Una chica de un país extranjero viene a la casa de una familia donde cuida a los niños 30 horas por semana y estudia un idioma en algún instituto, conoce la cultura. La familia debe pagarle un mínimo de dinero (275 euros mensual), alojarla y darle de comer. La chica toma algunas responsabilidades solo con los niños. Así, cada año llegan a Francia a trabajar muchas chicas que vienen como Fille au pair, algo muy interesante porque tener una nana en casa aquí es carísimo.

Hace tiempo nos llamaron unos amigos con plata, que viven en una ciudad cuica. Habían decidido contratar a una Fille au pair de origen latino a través de una agencia. Ellos querían que sus hijos aprendiesen español y querían que nosotros recibieramos a la chica en español el día que llegaba. A mi el asunto me parecía raro, porque las tres chicas que nuestros amigos debían escoger ya habían estado varias veces en Europa, ósea eran patiperras, ya hablaban varios idiomas incluyendo el Francés, a aprender no venían, a conocer la cultura tampoco. La elegida por catílogo fue “Lucía”, una latina católica, que estudiaba pedagogía, hablaba como 4 idiomas y tenía permiso de conducir internacional.

El día X, llego Lucía. En la cena de bienvenida, Lucía hablaba de sus viajes, que tenía pololo en Italia, su hermana en España…..los niños corrían por la casa, su madre detrás de ellos y Lucia la Fille au pair ni se movía, no pescaba a los pendejos, incluso cuando los padres enviaron a uno de los chicos a los brazos de Lucía, esta puso cara de asco. Con Charqui nos dimos cuenta inmediatamente, “parece que esta mina no viene aquí para trabajar con niños”….no sabíamos como decirle a nuestros amigos, era una opinión prematura.

Dos semanas después nos llaman nuestros amigos, Lucía SE HABIA IDO, dejando un gran problema, ambos trabajan y encontrar a alguien que te ayude con los niños toma mucho tiempo. Lucía no sabía conducir (su permiso era falso), por lo tanto no podía llevar a los niños al colegio y se quedaba durmiendo en casa, no le gustaba la ciudad, así que finalmente decidió “cambiar de trabajo” a París mismo. Revisando las facturas telefónicas se dieron cuenta que desde que llegó Lucía llamaba a escondidas a su pololo en Italia y nada menos que a celular, bastante caro. Luego se dieron cuenta que obtuvo su visa de un año y se echo el pollo a Italia. Nuestros amigos denunciaron a la chica en la agencia que la trajo, pero de nada servía, lo que ella necesitaba era entrar a Europa, luego se las arreglaría….de tonta no tenía ni un pelo.

Es el único caso que Fille au pair que hemos conocido.

Considero que este tipo de trabajo es una excelente oportunidad para conocer otras culturas, pero desgraciadamente la miseria y la inconciencia enlodan este tipo de intercambio. En nuestro caso, se aprovecharon de la ingenuidad de nuestros amigos, yo sentí vergüenza ajena.

  Más informaciones

Au pair around the world 
Agencia francesa Au Pair