Parte I. Tarjetita de invitación:

En Mayo anunciaron la visita de la Presidenta de Chile en Francia. Se encontraría el 29 de Mayo con la comunidad chilena en Paris y si alguien quería asistir bastaba escribir un e-mail al consulado dando sus datos.

Sin creer en el trabajo del consulado, pensando en la mentira, el pituto y la mediocridad de la administración chilena Cochayuya mandó un e-mail con cero faltas de ortografías pidiendo una invitación… Por si aca’.

Por la noche Cochayuya le contó a Charqui que había pedido una invitación. ¿Y me pediste una a mí?.....preguntó Charqui. Cochayuya no lo había considerado. A Charqui no le gustan las reuniones con Chilenos en Francia, que en general terminan en debates políticos de izquierda revolucionaria. Sin desprecio del pasado triste de nuestro país, las eternas discusiones con olor a naftalina lo tienen harto. Pero Charqui SI quería ir a ver a la Presidenta. Y Cochayuya le preparó el e-mail.

De izquierda, derecha, centro, nos habríamos interesado igual. Chile es nuestro país independiente de su color político actual…estamos por la democracia. Cochayuya estaba además por la “A” de PresidentA, un hito histórico para la mujer en un país dominado por los penes políticos de apellidos repetitivos, el cartuchismo, el consumismo, la corrupción, las teleseries lava cerebro y la religión católica, con curas retrógradas (y a excepción de los curas buenos).

Martes 26 de mayo:

Llegó la invitación de Charqui, quién abrió el sobre con unos ojitos de alegría como cabro chico en navidad. Pero no quería asistir si Cochayuya no iba…..”Te llevo de una oreja”, dijo Cochayuya y agregó: “Si no llega mi invitacion, yo mañana reclamo al consulado (no sería la primera vez ni sería la última). Y si no me dejan entrar, me cuelgo de la reja del hotel y reclamaré por machismo. Yo tuve la idea, yo mandé los e-mails, sería absurdo que sólo llegue una invitación para ti. A menos que me tengan fichada por reclamona”.

Miércoles 27 de mayo:

La invitación de Cochayuya llegó. Un lindo escudo con un cóndor y un huemul adornaban la tarjeta…eso le hizo recordar Chile y el dolor constante de vivir con el corazón en 2 países, pero no poder juntarlos.

“¿Cochayuya, que ropa nos vamos a poner?”.Preguntó Charqui.

“Ropa Normal, ¿o no?....Respondió Cochayuya.

“Tenemos que ir con un mínimo de formalidad, no vamos a ir a ver a la Presidenta en poncho de lana, zapatillas o jeans de calle. Me vas a tener que planchar el terno” dijo Charqui.

“¡N’importe quoi!!!!, ¿y tu tenis los deos crespos?”. No vamos sólo a ver a la Presidenta, vamos a ver a la primera mujer Presidente de América del Sur, una nueva era…sea coherente, Monsieur, usted agarra la plancha”.

Continuará…..

PD: Mis disculpas al consulado chileno en Francia que realizó un trabajo eficaz enviando las invitaciones. Confirmo que nosotros no tenemos pitutos y es un importante signo de transparencia e igualdad. Je suis désolée.